Lejos quedan ya las reticencias de los grandes fabricantes a conectar sus consolas. En pocos años hemos pasado de consolas totalmente aisladas a centros multimedia que piden conexión a gritos.
Aunque hubo intentos muy loables antes de Xbox, fue ésta consola, de las tres que triunfan en la actualidad, la que más y mejor apostó por el modo online desde el principio. Hoy en día Microsoft sigue apostando fuerte por el juego online, disfrutando del mejor sistema, pero manteniéndolo de pago. Sony, tras entrar con timidez en PlayStation 2, nos ofrece ahora una PlayStation 3 que no puede vivir sin conexión. Y Nintendo, como siempre, va despacio, pero con buena letra y a su aire.
Internet se usa en sistemas contra la piratería, para crear comunidad y estar conectado con los amigos, para jugar con otros, para descargar juegos, nuevos canales, temas, demos, vídeos, actualizar los juegos y las propias consolas, descargar material adicional para tus juegos, para experimentar nuevos formatos e innovar, informarnos, para compartir escenarios y otros elementos del propio juego, cooperar, concursar, participar en betas... Una consola sin conexión hoy en día pierde gran parte de su gracia.
¿Crees que realmente hace falta el soporte físico? Existe ya la posibilidad, no es algo del futuro, de bajarse los juegos completos. El ahorro de costes posibilita, en teoría, que los videojuegos estén al precio que siempre has soñado y es algo mucho más ecológico. Animo a todos a usar el servicio online, pero no a pagar lo mismo que en tiendas por un videojuego que debería ser más barato. No veo que el ancho de banda tenga que ser un problema, aunque no es ni mucho menos gratis como la gente piensa, ni veo tampoco obstáculos en el disco duro, siempre y cuando el fabricante permita bajar el juego cuanto uno quiera de sus máquinas una vez comprado.
Dicen los gurús que la distribución física de videojuegos aún va a aguantar 20 años. Yo espero que no sea así, que el blu-ray y similares pasen a mejor vida pronto y que la distribución digital no se limite a descargas de servicios y contenidos adicionales por motivos comerciales totalmente desconectados del los intereses de los usuarios, que queremos más y mejores juegos y, sobre todo, a mejor precio.
Internet cada vez se ve más como una gran oportunidad, como está ocurriendo con Battlefield Heroes, que será gratuito y se financiará mediante publicidad, y no como el origen de todos los males de la industria. Todos los caminos llevan inevitablemente a Internet.