Plataforma: Xbox 360
Editor: Koch Media
Desarrollador: Reality Pump
Lanzamiento: 3/12/2010
Género: Rol
Código PEGI: +16
Hace más de cuatro meses desde que publicamos el último avance de la esperada secuela de “Two Worlds” pero el tiempo pasa muy rápido y ya estamos de nuevo aquí para analizar el ambicioso proyecto de Reality Pump, un juego en el que han estado trabajando durante tres largos años para mostrarnos su mejor título hasta la fecha y uno de los grandes juegos de rol occidental a tener en cuenta para este final de año.
Todos aquellos que no tuvieron la ocasión de probar la primera parte no deberán preocuparse, ya que nada más empezar, a modo de introducción, se nos mostrará un pequeño resumen de los hechos acaecidos en la historia anterior. Esta introducción será suficiente para engancharnos a un juego que supera ampliamente al original en todos los aspectos, especialmente en la jugabilidad y en su renovado apartado técnico.
La historia tiene lugar cinco años después de lo sucedido en Two Worlds. El mundo de Antaloor se encuentra en grave peligro y nuestro héroe ha sido apresado por el malvado Gandohar, que se ha hecho con el dominio del reino. Además Kyra, la hermana del protagonista, que también se encuentra retenida por Gandohar, está ahora bajo la influencia de un poder mágico del que no puede liberarse. La historia cambia de rumbo cuando un grupo de Orcos, enemigos naturales del protagonista, urden una estratagema para su liberación. A partir de ese momento, comenzaremos a ser partícipes de la trama gracias a un completo tutorial, que comenzará mostrándonos los movimientos más básicos de nuestro personaje mientras somos ayudados a escapar de las mazmorras y dilucidará los más complejos cuando salgamos del castillo.
Una vez fuera de la fortaleza, un miembro del clan orco nos acompañará hasta su oráculo que, como ya hiciese Galadriel en “El Señor de los Anillos”, nos mostrará un posible futuro, no muy alentador, que podría materializarse en el caso de que no hiciésemos frente al señor oscuro de Gandohar. Esto nos motivará a iniciar una aventura en la que deberemos acabar con la tiranía del nuevo gobierno y salvar a nuestra hermana de su particular infierno.
Un héroe para todos los gustos
Nos encontramos ante un RPG occidental de corte épico-medieval, altamente inspirado en novelas como “El Señor de los Anillos” o “Crónicas de la Dragonlance” y en juegos como Oblivion, aunque la historia de Two Worlds II es completamente original y se aprecia el esfuerzo de sus desarrolladores para mostrarnos un guión bastante sólido y ameno, lleno de sorpresas y giros inesperados.
Antes de iniciar la aventura podremos customizar a nuestro personaje con diferentes rasgos faciales, color de pelo, altura, volumen corporal, etc... aunque de forma bastante limitada y con muchas menos opciones que, por ejemplo, en la serie Fallout. Una vez iniciada la aventura, manejaremos a nuestro héroe en tercera persona y observaremos que sus animaciones han sido bastante más cuidadas que las que vimos en la primera parte aunque siguen pareciéndonos algo robóticas a la hora de ejecutar ciertas acciones. A pesar de todo, se muestran mucho más naturales que las de otros juegos del mismo género como los mencionados Oblivion o Fallout.
Al principio de la historia, como en todo juego de rol, nuestro personaje tendrá un aspecto de lo más básico y según vayamos avanzando podremos ir definiendo su estilo en base a nuestras preferencias. Gracias a una serie de habilidades bastante completa, podremos fortalecer a nuestro héroe como guerrero, arquero, mago, etc. Lo mejor será tratar de potenciar en su justa medida un poco de aquí y otro poco de allí para poder ser lo más versátil posible, aunque siempre habrá un estilo que nos atraiga más que otro y determine nuestra forma de jugar a largo plazo.
Con nuestro personaje podremos realizar multitud de acciones como correr, nadar, tocar instrumentos musicales, montar a caballo, atacar cuerpo a cuerpo o a distancia, realizar movimientos de sigilo con ejecución incluida y un largo etcétera. Por otro lado, también tendremos la opción de crearnos nuestros propios hechizos, pociones, armas o armaduras mediante un sistema que al principio puede parecer algo complejo y engorroso, pero que después de unas horas de juego nos resultará bastante satisfactorio. Por último, contamos con tres “grupos de armas” que vienen a ser configuraciones de nuestro personaje con sus armas e indumentarias. Podremos acceder a cualquiera de estos tres grupos en todo momento y de forma inmediata con un solo movimiento de la cruceta del mando, lo cual será muy útil para hacer frente a los diferentes peligros que nos vayamos enfrentando.
Las tierras de Antaloor
Durante la aventura descubriremos varias islas de enorme tamaño que tendremos la posibilidad de recorrer tanto a pie como a caballo y conforme avancemos en la historia podremos cruzarlas navegando, ya que las distancias entre islas son tan extensas que si se nos ocurre la disparatada idea de cruzarlas a nado acabaremos extenuados y moriremos en el intento. También contamos con la cómoda opción de utilizar una serie de portales distribuidos a lo largo del extenso mapeado que, una vez descubiertos, podremos utilizar para desplazarnos de forma inmediata entre diferentes puntos del escenario.
Además de las misiones principales de la historia, el juego cuenta con un gran número de misiones secundarias que elegiremos a nuestro antojo y que nos vendrán bien para incrementar nuestros niveles y enfrentarnos con mayores garantías a los enemigos más poderosos, además contamos con el plus de que las misiones secundarias son bastante variadas y entretenidas. Si nos dedicamos exclusivamente a seguir el hilo argumental, podremos acabarnos el juego en unas 30 horas, pero como en todo buen juego de rol, la gracia se encuentra en cumplir con los diferentes “side-quests”, que nos permiten disfrutar de una experiencia mucho más completa y satisfactoria.
Para afrontar la aventura podremos seleccionar entre varios niveles de dificultad. Aconsejamos que los menos avezados al género se atrevan a iniciarla en el nivel medio, pero los más experimentados a este tipo de juegos deberían seleccionar el nivel de dificultad más alto, ya que es el único que podrá suponerles un reto. El motivo principal se debe a que el juego de por sí no es excesivamente difícil y subiremos nuestros niveles de experiencia con relativa facilidad. Esto se traduce en un alto enriquecimiento de nuestras capacidades en un corto período de tiempo.
Tanto los combates con los enemigos, como la interacción con el resto de personajes y objetos mostrarán una física muy sólida y realista. El sistema de combate es a tiempo real y nos ha parecido muy fluido y efectivo. Para luchar deberemos pulsar un botón de ataque que podrá ser combinado con diferentes bloqueos y golpes mayores, los cuales iremos obteniendo según vayamos ganando experiencia y skills.
El título también cuenta con una serie de minijuegos que amenizan el desarrollo de la aventura. Algunos, como el forcejeo de cerraduras, los utilizaremos con bastante frecuencia, aunque también nos encontraremos con otros más secundarios, como los juegos de azar, con los que podremos ganar o perder dinerillo y los minijuegos musicales, que nos permitirán tocar diversos instrumentos al más puro estilo Guitar Hero.
Grandes virtudes y algunos defectos
En cuanto al apartado técnico, hemos de quitarnos el sombrero ante el gran esfuerzo de Reality Pump. Los entornos abiertos ofrecen una extensión espectacular, son realmente preciosos y muestran un trabajo de iluminación encomiable. En ellos podremos encontrarnos con animales de diversas especies tales como hienas, cuervos, rinocerontes y otros más peligrosos. Los pueblos, ciudadelas y castillos también dan la talla y veremos asentamientos como “Hatmandor”, que parecen tener vida propia gracias a un excelente apartado visual que nos mostrará decenas de personas recorriendo las calles a la luz del día. También debemos hacer especial mención a los interiores de casas, castillos, alcantarillados, cuevas y un largo etc. que se muestran altamente detallados y ponen la guinda a un excelente trabajo. Lo mejor de todo ello es que los tiempos de carga son muy cortos y en breves instantes pasaremos de un interior a un exterior sin romper el ritmo del juego.
Como contrapartida, en las versiones para consolas y más concretamente en la de PS3, que es la que hemos analizado, nos encontramos con ciertas deficiencias que enturbian ligeramente la experiencia de juego. Por un lado, hemos observado ciertos parones en la imagen que se manifiestan sobre todo en las secuencias de vídeo a tiempo real, cuando la consola lee los datos desde la unidad de almacenamiento o cuando guardamos la partida automáticamente. Esto resulta algo molesto pero en ningún momento afecta a la jugabilidad. Por otro lado, también nos hemos encontrado con algún que otro bug, pero ninguno de importancia. Por último, el juego tampoco se libra del molesto “popping”, algo habitual en aventuras con mundos tan extensos, que nos mostrará ciertos elementos del escenario de forma algo brusca. Afortunadamente, esto ocurre con mucha menos frecuencia que en otros títulos de características similares.
El apartado musical está compuesto por diversas melodías que cuadran correctamente con las diferentes situaciones en las que nos encontramos, con melodías rítmicas medievales en las ciudades y piezas más épicas y contundentes en las situaciones de peligro. El doblaje “en inglés” está bien interpretado aunque la voz de nuestro personaje nos ha parecido algo apagada. El juego ha sido traducido a nuestro idioma y los textos se muestran a un tamaño bastante grande para mayor comodidad del jugador.
Two Worlds II también cuenta con un apartado multijugador online que alargará aún más la vida del juego. En él crearemos a nuestro gusto el tipo de personaje que queramos utilizar, pudiendo elegir entre elfos, humanos, enanos y orcos de diferente género y características. Lo manejaremos por una especie de sala común donde interactuaremos con otros usuarios y tendremos acceso a una gran diversidad de modos de juego. Entre ellos se encuentra un sencillo y original cooperativo por capítulos y otros más directos como combate a muerte, duelos y búsqueda de cristales. También tendremos acceso al novedoso modo Aldea, donde crearemos nuestro propio asentamiento y deberemos defenderlo del resto de enemigos.
Conclusiones
Two Worlds II es un completísimo RPG que mejora sustancialmente al original y nos envuelve en un mundo de fantasía del que no querremos escapar. Sus atractivos e inmensos entornos, su jugabilidad directa y sencilla, así como la gran cantidad de cosas que podemos realizar en el universo de Antaloor son algunas de las grandes virtudes de una aventura que está dirigida tanto a los más veteranos del género como a los que se quieran iniciar en el mismo. El novedoso sistema de hechizos, pócimas, forjas y demás podrá confundirnos e incluso frustrarnos al principio, pero con la práctica lo acabaremos dominando a la perfección y disfrutaremos de una gran cantidad de invenciones propias. El único lastre del juego se encuentra en los frecuentes tirones y bajadas de frames del motor gráfico, así como en algunos bugs que, aun sin afectar al apartado jugable, enturbian la gran experiencia del título.
domingo, 19 de diciembre de 2010
Análisis del Videojuego Two Worlds II
Etiquetas: Análisis Xbox360 Juegos
-